Todo va al revés

Es curioso cómo se parece el mundo del deporte al mundo del trading y de las inversiones. Hace unos días volví a ver la película “Million dollar baby” de Clint Eastwood. Para los que no la hayáis visto se cuenta la historia de una boxeadora que a pesar de su edad y gracias una fuerza de voluntad impresionante consigue llegar a pelear por un importante título de su categoría en el que sufre un accidente queda tetrapléjica.

No obstante, lo que más me llamó la atención de la película fueron los comentarios de Morgan Freeman al describir la esencia del boxeo como deporte. Según él en el boxeo todo va al revés. Nada es lo que parece.

“El boxeo es un acto antinatural, por que todo va al revés si quieres desplazarte a la izquierda no das un paso a la izquierda, cargas sobre el pie derecho, para desplazarte a la derecha usas el pie izquierdo. En vez de huir del dolor como haría una persona cuerda, das un paso hacia él, en el boxeo todo va al revés”

Preciosa frase que recoge a la perfección el espíritu de las personas que nos dedicamos al trading. De hecho, una de las primeras lecciones que tuve que aprender como trader fue precisamente que las pérdidas son parte del juego que aceptar el dolor de tener una pérdida, de aguantar un golpe, es precisamente lo que te hace ganar. Un trader profesional no se verá afectado por tener una o varias operaciones perdedoras. Se mantiene fiel a su plan, sigue adelante a pesar de que las cosas se tuerzan por que más allá del resultado de un día, sabe que el tiempo juega a su favor. Al contrario de lo que se podría pensar ganar haciendo trading no depende de aprender a ganar dinero sino de aprender a perderlo. En el trading todo vá al revés.

“El boxeo es un acto antinatural, en el boxeo todo va al revés: a veces la mejor manera de dar un puñetazo es retrocediendo”.

Pero en el trading al igual que en el boxeo se debe mantener el equilibrio, si caes será muy difícil que te vuelvas  levantar. Uno de los secretos del trading es sin duda la gestión del capital. Sin ella, por muy buena técnica que tengas o por muy bueno que sea tu sistema de trading correrás el riesgo de perderlo todo. En el trading al igual que en el boxeo hay que aprender a cubrirse.

“Hay heridas demasiado profundas y cercanas al hueso, por mucho que lo intentes no eres capaz de para la hemorragia”.

Es muy común que nos olvidemos de quien está al otro lado, quienes manejan el mercado, contra quienes te enfrentas.  Las mentes más brillantes, los grandes fondos de inversión, los especuladores institucionales, están ahí esperando que falles, que cometas un error para darte un golpe. Ellos vigilan, quieren que te canses, que te confíes, que les pierdas el respeto y cuando ven una oportunidad golpean y lo hacen con fuerza. Hay que respetar al mercado y nunca bajar la guardia, esperar que actué para aprovechar su propia fuerza a tu favor, de esa manera podrás ganarte su respeto.

“ El boxeo es cuestión de respeto, de ganarte el tuyo y de quitárselo al contrario”

Cuando aprendes a hacer trading y forma parte de ti, se acaba convirtiendo  en una manera de ver la vida, te acabas dando cuenta de lo que has cambiado desde que empezaste en ese camino duro hacia la consistencia en real. Has pasado por aprender las técnicas básicas, has dedicado cientos de horas a aprender y aplicar el sistema en simulado, de aprender con cada operación, con cada error, de demostrarte que tienes las cualidades para enfrentarte a tu rival, de que estás listo. Hasta que llega el momento de operar con tu capital, y ahí empieza todo de nuevo.

Cuando miro atrás veo que ha cambiado mi concepto de disciplina, la capacidad de advertir mis emociones, de entender que la recompensa no está en el final del camino sino en el camino en sí, que cada lección tiene un precio, cada error una recompensa. Finalmente acabas entendiendo que debes abrazar la incertidumbre como modo de vida, la aceptas por que la seguridad en ti mismo es tu nuevo modo de vida.

“Les enseñas como deben colocar las piernas debajo de los hombros. Para formar boxeadores debes decaparlos hasta llegar a la madera pelada. No puedes simplemente decirles que se olviden de lo que sepan. Deben olvidarse de todo hasta la médula. Que solo hagan lo que tú digas, cansarles tanto que solo te escuchen a ti, que solo oigan tu voz, que solo hagan lo que tú digas y nada más. Enseñarles como mantener su equilibrio y quitárselo al contrario. Como generar impulso empezando con el dedo del pie derecho, como flexionar las rodillas cuando lanzas un Jack. Como boxear retrocediendo para que el otro no quiera ir a por ti y entonces tienes que volver a enseñárselo todo, una vez y otra y otra vez mas hasta que crean que nacieron así”

Además si todo este camino es duro cuando tomas la decisión de que quieres dedicarte al trading, es muy probable que te encuentres con incomprensión de tu entorno. No tiene por qué ser tu caso pero no debemos olvidar que en ciertos círculos el mundo de la  bolsa y de la especulación está lleno de connotaciones negativas . El miedo, las historias de fracaso o la falta de información pueden hacer que tomar la decisión de dedicarte a este mundo sea complicada a pesar de que haya algo dentro de ti que te diga que ese es el camino que debes seguir, que es ahí donde vas a poder demostrarte de qué estas hecho, la decisión en ocasiones no es fácil. Es probable que lleguen traspiés inesperados, caídas y duras pruebas a superar, pero eso es ser trader.

“Si existe alguna magia en el boxeo es la de presentar batalla más allá de la resistencia, es la magia de arriesgarlo todo por un sueño que no ve nadie excepto tú”

El trading es un acto antinatural, en el trading todo va al revés.