La fórmula para encontrar un trading plan que te funcione

En esta ocasión quiero compartir un modelo muy sencillo que te puede ayudar a tomar mejores decisiones sobre tus trading plans.

Hemos comentado la conveniencia de que estos TP cumplan dos requisitos: que se ajusten a tus necesidades y que tengan el potencial de llevarte a tus objetivos.

Tus necesidades horarias, el capital con el que cuentas, tus rasgos de personalidad son los que son y es importante que el TP que definas esté al servicio de tus limitantes y no al revés. No tiene sentido que busques una operativa intradiaria si no tienes disposición para estar frente a la pantalla, como no tiene sentido que busques una operativa en Futuros si tu capital inicial es insuficiente y no quieres trabajar para una empresa externa, y tampoco lo tiene que definas un trading plan que requiera un análisis cuantitativo muy profundo y concienzudo si tu disposición personal es otra.

Pero teniendo en cuenta tus propias circunstancias puedes sacar conclusiones iniciales de lo que te es más conveniente: Swing trading, scalping, trading posicional, Futuros, CFD, Forex, acciones, opciones, puedes elegir un horario de trabajo, un mercado o un grupo de mercados, etc.

Ahora bien, ¿cómo sabrás que el TP que defines tiene el potencial de llevarte a tus objetivos? Es decir, teniendo en cuenta tus circunstancias, sigue habiendo un mundo de posibilidades que debes cerrar y definir, pero además de encajar con tu situación personal tiene que ser capaz de llevarte a tus metas.

En este punto lo que los operadores suelen hacer es demorarse mucho tiempo en posibles trading planes, prueban con uno, lo modifican, cambian algún aspecto, prueban con otro, y tiene dudas y más dudas: ¿hago esto, o lo otro? ¿añado este aspecto, o lo elimino?

La fórmula que te propongo te puede guiar a la hora de definir definitivamente tu trading plan, de manera que, cuando debas enfrentarte al necesario back testing para obtener los datos que te permitirán operar desde la confianza, y que validarán que, efectivamente operando el TP que has definido, llegarás a los objetivos que te has marcado de forma eficiente, no te quedarás en un mundo de posibilidades ilimitadas, ni pasarás demasiado tiempo dándole vueltas a opciones. Al revés: irás directo a un TP personalizado funcional.

Imagina la pérdida de tiempo que supondría hacer el backtesting de un sistema que no te encaje y con el que no te sientas cómodo, o de uno que encajándote no tuviera el potencial que tú necesitas.

Haz lo siguiente: firma cuatro contratos distintos, comprométete a tener cuatro versiones de tu trading plan de la siguiente manera:

Cierra un primer trading plan, el que sea que tu intuición te diga que puedes llevar a cabo ya, y comprométete a ejecutarlo durante un día. No más que eso. Un día. Ese es tu primer contrato: el compromiso de ejecutar tu TP acorde a los parámetros que elijas y sin desviarte de él, durante un día.

A continuación evalúa tus resultados: ¿cómo te has sentido operando ese TP? ¿Hay algún aspecto que te ha gustado especialmente? ¿alguno que descartarías de entrada o qué modificarías? Hazlo. Ahora firmarás un segundo contrato con una duración de tres días en el que te comprometarás a operar una segunda versión de tu TP. Durante esos dos días lo que harás será ser fiel a tu contrato. Recuerda que el diseño depende de ti, que son tus reglas, tus cambios, tus modificaciones. Añade o elimina lo que creas conveniente, pero una vez lo hayas hecho ejecútalo durante tres días sin más modificaciones.

Al final de esos tres días tendrás datos muy valiosos sobre tu sistema. Sabrás con mayor detalle con qué aspectos te sientes más cómodo y que otros deberías modificar, qué te gusta y qué no te gusta, con lo que puedes hacer una nueva versión mejorada de tu TP.

Ese será tu tercer contrato: vas a redefinir tu TP incorporando tu experiencia pasada para hacer que encaje mejor con tus necesidades personales y también con tus objetivos, y vas a comprometerte a una ejecución precisa durante 7 días. En ese tiempo no puedes cambiar nada, no puedes añadir, ni quitar, ni variar, simplemente trabajarás en llevar a la práctica tus propias reglas de la forma en que las has definido y dentro de los parámetros que has establecido.

Y al final, después de siete días de ejecución tendrás una experiencia valiosísima sobre tu TP, y podrás llevar a cabo las últimas modificaciones. Habrá algún aspecto sobre el que tendrá claridad y que querrás sí o sí que forme parte de tu TP y habrás descartado otros que, por los motivos que sea, no terminan de funcionarte. Tendrás datos objetivos en los que basas tus decisiones y estarás en disposición de cerrar un TP que realmente funcione para ti.

En esta ocasión, lo que harás será firmar el último contrato por una duración de diez días. Te comprometes a seguir las reglas que especifiques, sin modificarlas, alterarlas, cambiarlas o improvisarlas, durante ese tiempo. Ese es tu trabajo y en él pondrás tu foco de atención.

Después de diez días tendrás un TP funcional, que habrá pasado por el filtro de tus propias necesidades, y que estarás en disposición de backtestear. De esta manera habrás evitado hacer un trabajo sobre algo que no encaja con tus necesidades, habrás podido añadir los aspectos que sientas más adecuados para ti y contarás con un procedimiento potente y efectivo.

En vez de hacer un backtesting tediosos sobre un TP para descubrir al final de tu trabajo que no encaja en lo que necesitas o en lo que quieres, habrás minimizado esa opción con cuatro versiones rápidas, versátiles, ágiles y orientadas a resultados.

La fórmula 1-3-7-10 la puedes aplicar también si haces swing trading, o trading posicional, pero en esos casos en vez de definir periodos de días, deberás definir periodos de semanas: una semana, tres semanas, siete semanas y diez semanas. La idea es la misma: poner a prueba rápidamente tus ideas para no encallar en un mundo de opciones ilimitadas.