Técnicas emocionales para mejorar tu trading

Hemos visto lo importante que es tener una forma sencilla de regular nuestra carga emocional, y hemos dicho que la respiración y la relajación muscular son formas de lograrlo. Veamos ahora cómo hacerlo específicamente y centrémonos en la respiración.

Podemos ver que el proceso respiratorio tiene cuatro fases distintas: podemos tomar aire, podemos aguantar la respiración con los pulmones llenos, podemos soltar el aire, o podemos retener la respiración con los pulmones vacíos.

Utilizaremos distintas combinaciones de estas cuatro fases para sosegar nuestra carga emocional. Por ejemplo, una combinación 6-2-6-2 consistirá en tomar aire durante seis tiempos, retener la respiración con los pulmones llenos durante dos tiempos, soltar el aire durante seis tiempos, retener la respiración con los pulmones vacíos durante dos tiempos, y vuelta a empezar, mientras que una respiración 6-4-8-2 consistirá en tomar aire durante seis tiempos, retenerlo durante cuatro, soltarlo durante ocho y sostener la respiración con los pulmones vacíos durante dos. La naturaleza consciente- subconsciente de la respiración nos permite hacer este trabajo y modular nuestra carga emocional. Lo que buscamos es quedarnos en un estado en el que podamos trabajar sobre nuestros errores y sabemos que si no dirigimos nuestras emociones, ellas nos dirigirán a nosotros, y la respiración es una forma sencilla de lograr esa modulación.

Otra forma de lograrlo es a través de la relajación muscular sistemática. No podemos estar estresados y relajados simultáneamente, así que, si relajamos nuestros músculos podemos entrar en un estado de relax que evita que nos estresemos.

Una tercera forma de regular nuestra carga emocional es a través de la simple comprensión de que estamos siendo, en este preciso momento, en este “ahora”. Si ponemos la atención en el aquí y en el ahora, en lo que está siendo, podemos evitar crear tiempo mental, y con ello la activación emocional. Si dejas que tu mente fantasee con lo que pasará en la siguiente operación te vas a futuro, pero ese futuro lo creas tú. Si recuerdas el dolor de una operación fallida, te vas al pasado, e igualmente ese pasado lo creas en tu mente. Si utilizas el foco de atención para realizar el hecho de que está siendo, puedes parar el tiempo mental.

Sea cual sea el método que utilices, lo que buscas es crear un espacio mental para poder trabajar sobre tus errores. El esquema es el siguiente: has hecho una relación de errores y has identificado el principal reto, lo tienes presente y vas a trabajar sobre él, has puesto una alarma para que te ayude a identificar la tensión emocional: la activación, y cuando ves que estás tensando tus músculos o acelerando tu respiración pones tu foco de atención ahí para evitar que tu condicionamiento te haga entrar en modo ataque o en modo huída. Así que relajas, respiras profunda y lentamente, sueltas la musculatura y creas distancia entre lo que sucede, el hecho de que estás haciendo trading, y cómo responde tu cuerpo: la carga emocional. Ese espacio te permite observar tu pensamiento, que es el que origina esa carga emocional desmedida.

La potencial amenaza es una interpretación de tu mente, es tuya, la creas con las ideas que abrazas, que puede que sean desadaptadas o irreales, y lo que haremos a continuación será entrar en ese espacio con nuestra artillería racional para cambiar el final de la historia, rompiendo nuestras respuestas condicionadas. Desde ese espacio podrás elegir tu mejor respuesta.

En el próximo capítulo veremos cómo insuflar lógica y elegir lo que más te conviene. Quedo a tu disposición para profundizar cualquier aspecto que sea de tu interés.