Tu relación de errores como trader

Si nuestro estado emocional no es el correcto, no estamos en condiciones de operar y debemos de abstenernos pero, ¿cómo podemos saber en qué estado emocional estamos?

El punto principal es el reconocimiento de nuestra responsabilidad en los resultados que obtenemos: lo que conseguimos depende de lo que hacemos y lo que hacemos depende de cómo nos sentimos. Sin ese reconocimiento seguiríamos luchando contra nosotros mismos buscando soluciones donde no están: no son los mercados, ni los sistemas, ni el conocimiento técnico, sino nuestra mala gestión emocional. Si no estamos en condiciones de operar porque nos sentimos amenazados, debemos corregir eso comenzando por reconocer nuestra responsabilidad.

Nuestra sugerencia es que monitorices tu estado emocional con la misma dedicación con la que monitorizas los mercados, de esta manera estarás en condiciones de detectar tu activación y podrás notar que estás entrando en un estado inadecuado para operar. Aprietas los dientes, cierras las manos en un puño, tu respiración se entrecorta… es el estado que antecede a la lucha: muy útil si tienes que enfrentarte a un depredador o tienes que salir corriendo, pero al mercado no le vas a ganar luchando.

Si te das cuenta que la lucha no te llevará a la victoria, estás en disposición de buscar un camino distinto. La ruta que te proponemos hacia la consistencia emocional comienza por hacer una relación de los principales errores que cometes como trader: perseguir el precio, dilatar los stops, dudar, etc.

Cuando estés operando y te des cuenta de que comienzas a alterarte, el siguiente paso será regular tus emociones a través de la respiración y la relajación muscular. Esto creará un espacio mental desde el que podrás utilizar la lógica para cuestionar la racionalidad de tus impulsos. A este modelo lo llamamos el modelo R3: Relación de errores, Regulación emocional, Racionalización, y nos servirá para trabajar nuestro peor trading. Al eliminar de forma sistemática nuestros errores mejoraremos nuestros resultados y estaremos trabajando sobre algo que podemos gestionar. Ya no dependeremos de la buena voluntad ni de que se produzca un cambio por azar, sino que estaremos al timón de lo que conseguimos trabajando sobre lo que hacemos.

En este vídeo te damos algunas sugerencias para hacer esta relación de errores, y ponemos algunos ejemplos típicos para que puedan servirte de inspiración. 

Como siempre, quedo a tu disposición para profundizar cualquier aspecto que sea de tu interés.