fbpx ESTO ES LO QUE TE IMPIDE GANAR EN TRADING | Trading de Futuros Pasar al contenido principal

ESTO ES LO QUE TE IMPIDE GANAR EN TRADING

ESTO ES LO QUE TE IMPIDE GANAR EN TRADING

Si opones resistencia te destrozará una vez y otra, y otra, hasta que no quede nada que entregar, perderás el dinero, la salud y la confianza. No puedes ganar con la fuerza bruta, ese camino lleva al dolor y al sufrimiento Pero claro, eso es justo lo que has hecho cuando te has enfrentado a otros retos, y eso es justo lo que funciona, así que es lógico que tengas confianza en ese procedimiento. Confías en ti, tus trofeos hablan de tu validez ¿por que no consigues doblegar el trading? Porque se trata de un animal de otra especie. El trading no es como nada que hayas hecho con anterioridad, no es como un deporte de competición, aunque sea tremendamente competitivo, no es como montar un negocio porque en el mundo corporativo hay muchas habilidades soft que no te servirán en el mercado. El trading es una batalla que se libra en tu mente, creeme.

Puedes ver tus resultados de muchas formas posibles, como el reflejo de tu incompetencia, de tu falta de capacidad, como fuente de tu frustración, o como una señal, un cartel gigante que está gritando exactamente lo que debes hacer, y por lo tanto como un regalo. Uno se enfrenta al trading con la confianza con la que se ha enfrentado a otros proyectos, pero el trading se encarga rápidamente de ponernos a todos en nuestro lugar. La primera parte de esta aventura es la de la negación: he tenido éxito y confío en que lo tendré, así que utilizo todos mis trucos contra el mercado, y fracaso, y cuantos más trucos, y más confianza, más agotado terminaré. Si he sido una persona tenaz no me rendiré ante el primer revolcón, me compondré y volveré al ataque, pero ¿cuánto tardaré en darme cuenta de que no hay salida por ahí? comprender que eso es inversamente proporcional a tu confianza: a más confianza más dolor estarás dispuesto a soportar.

Al final el mercado acabará contigo o acabará con la versión de ti que se empeña en utilizar los viejos trucos. Y no importa qué nombre tengan: fuerza de voluntad, seducción, humor, inteligencia. Distintos disfraces para más de lo mismo. Si superas esa fase y te rindes, si abandonas toda confrontación y estás dispuesto a dejar los viejos trucos a un lado tienes posibilidades de entrar en la otra puerta, pero eso no suele ser algo rápido, intuitivo y sencillo.

Al revés: el trader que confía en sí mismo se niega a rendir esa parte de él que le ha servido para vencer en el pasado y a más confianza más dolorosa es esa renuncia y por lo tanto más improbable. Pero no hay otro camino. Debes matar eso que está detrás de tus éxitos pasados, porque es justo lo que impide tu consistencia. Tu arrogancia y esa seguridad que te ha caracterizado no te servirán más que para prolongar tu agonía. Si no funciona así funcionará de otra manera, te dices, y cambias tu sistema de trading, añades indicadores, utilizas nuevos modelos, pero tampoco funciona, así que no te rindes, tú no eres de los que tira la toalla cuando el muro del kilómetro 30 te golpea, tu no te rendiste cuando te aplicaron una estrangulación sanguínea y te despertaste mareado unos instantes más tarde, no lo hiciste cuando se metieron con tu hermano y te llevaste un puñetazo en el estómago, rendirse no es una opción, pero amigo, como trader debes rendirte. Debes dejar de oponerse, en esa dirección solo hay dolor y sufrimiento. Por eso es tan frustrante para ti y para los que somos como tú, cuanto más confíes en ti más tardarás en comprender, y mientras más tardes más te alejarás del resultado que buscas. Es una paradoja. Pregúntate entonces ¿cuánto más dolor necesitas soportar para abrir la mano y golpear el tatami?

¿Me sigues? ¿Dónde está tu punto de rotura? ¿Qué necesitas que pase para que te rindas de una vez por todas? Comprende que mientras sigas confiando en ti y en tus posibilidades seguirás condenado a la frustración, es por eso que después de perder una cuenta te recompones y lo intentas con otra, cambias de mercado, de escuela, de sistema, pero sigues siendo tú el obstáculo. Eso es lo que no ves, y eso es lo que necesitas. Tu falta de resultados está gritando lo que debes hacer, pero tu arrogancia te deja sordo a esos gritos. No necesitas que te salven, no quieres que te salven, no lo has necesitado en el pasado y no lo necesitas ahora, o eso crees. Deja que te diga que estás equivocado. Deja que te diga que por ahí no hay salida, que debes abandonar ese camino, que necesitas cambiar el enfoque, ojo, no hacer lo mismo con otro nombre, eso no funcionará. No debes cambiar de mercado, ni de indicadores, ni de sistema, sino de enfoque. Atiende: tu falta de resultados habla de ti. Habla de tus debilidades, de tus retos personales, y eso es lo que debes superar. Observa lo que estás haciendo en el mercado: saltas a perseguir operaciones, improvisas entradas, aumentas tu exposición, te vengas, atacas, te paralizas. Esos son los gritos que debes escuchar, las señales que debes leer. Están indicando qué necesita ser hecho así que presta atención.

No importa nada el sistema que utilices sino eres capaz de cambiar la mente que opera ese sistema. No importa lo buena que sea tu ventana de oportunidad si el riesgo que asumes es excesivo, no importa lo potente de tu modelo si eres incapaz de respetarlo. Un nuevo sistema de trading que no seguirás te condenará a seguir en las mismas. Así que di basta. Di que ya tienes bastante, que ya está, que lo dejas, que comprendes que esa forma de ver el trading no es la que necesitas. Ríndete y abandona.

Deja a un lado el tú que se opone y permite que el tú que necesita tomar el timón lo haga. Deja a un lado el tú que lucha, que se esfuerza, que persiste, y crea el espacio necesario para que brote el tú que necesitas. No hay otro camino por el que progresar, ¿lo ves? El obstáculo es el camino. Tus puntos débiles, lo que haces una y otra vez en el intento de solucionar tus retos, son el problema con el que te impiden el éxito. Necesitas dejar eso a un lado para que puedas convertirte en el tipo de operador capaz de sostener los resultados. Dentro de ti hay un operador esperando que lo despiertes, uno capaz de lograr lo que anhelas, de hacer realidad tus sueños, pero está amordazado por tu arrogancia autodestructiva. Debes liberarlo. Abraza quién has sido hasta ahora, acoge con cariño la persona que has manifestado y que sigue atenazando el timón, y hazle saber que se acabó. Agradece lo que ha hecho por ti, reconoce sus talentos, sus buenas intenciones y su disposición, y encárgate de hacerle saber que puede descansar, dile que estarás bien sin ella al frente.

Asegúrate que puede seguir ahí, velando por tus intereses, y que la llamarás cuando la necesites, pero que ahora ha llegado el momento de hacer frente al proyecto del trading de la única manera como aún no lo has intentado, que es no desde la lucha, la confrontación y las resistencia, sino la transformación y el discernimiento. Y alienta a que esa otra parte de ti que ha estado observando tu sufrimiento en silencio se vaya poniendo de pie y asuma el mando. Ella sabe lo que debe ser hecho, lo que debes desestimar, y lo que hay que cambiar. Ella ha sido el testimonio de tu empeño infructuoso, de tu oposición y resistencia, conoce tus retos personales y sabe cómo superarlos, y lo más importante, entiende que lo que necesitas es poner el foco de atención en el obstáculo, porque en el trading el obstáculo es el camino.